VALORES, CORRUPCIÓN, ARGOLLAS – Parte 1: El Coyote y el Correcaminos
VALORES, CORRUPCIÓN, ARGOLLAS – Parte 1: El Coyote y el Correcaminos
“¿Tan difícil es andar derecho?” (Nadine Heredia)
El tema es amplio, y lo inicio arriesgando una respuesta a la añeja pregunta de la Primera Dama, porque a pesar de la cantidad de tiempo que ha pasado desde que la hizo, y fuera de la anécdota que la causó - que trajo cola pero fue anécdota al fin y al cabo -, nadie se la tomó en serio y nadie la respondió directa, frontal ni cabalmente. Así que a la luz de los últimos acontecimientos, trataré de esclarecerla su poquito. Es que creo que es una pregunta que en serio debería tratar de responderse, pues alude a ciertas cosillas de enorme importancia.
Respuesta a una pregunta
La respuesta, naturalmente, es NO, NO ES NADA FÁCIL ANDAR DERECHO. Y esto es una corroboración política que cuando se es oposición resulta tan fácil de hacer como de convertir en caballo de batalla, y cuando se es gobierno se convierte en un problema con el que lidiar y en un pulpo-tiburón que antes que te des cuenta primero te atrapa con sus tentáculos y luego te come. En especial porque mientras se crea que la respuesta a esta pregunta es ética y moral en su fundamento, pues no andamos derecho ni en lo ético ni en lo intelectual. Porque se puede ser inmoral y bruto, como el Tremendo Juez Malzón el de La Parada, pero más te vale no ser bruto, en especial si eres inmoral. Resulta mucho más fácil que te encuentren, te evidencien y eventualmente te envíen a la Canasta.
(Paréntesis Propedéutico: Para los pajaritos sin hiel que les falte cayetano, les chamullaremos que Canasta es el chaplín para Cana = Cárcel, es decir, ese sitio donde la Indiada cree que vas si cometes falta).
La corrupción no es un tema tan ético cuanto político, y eso quiere decir en lo fundamental que hay que tenerla como objeto de estudio tanto como de objeto de condena moral. Más exacto es decirlo así: No hacemos absolutamente nada con condenas morales si no tenemos dientes para morder. Y por eso yo en lo personal me muero de risa con las declaraciones y convocatorias de los medios de comunicación, que no sabemos si responden a una encantadora ingenuidad, a una mayúscula estupidez o simplemente a connivencia y complicidad con la delincuencia, la mafia y las argollas.
Grupos expertos en corrupción
Claro que es un enorme avance que un corrupto pueda caer eventualmente en la Canasta, más que sea Canasta de Luxe. Dígalo el expresidente Fujimori, que aunque los barrotes sean de oro, no son menos barrotes. Aunque si perteneces a ciertas agrupaciones la corrupción te pasa por el costado, y tiene que ser muy gordo lo que hagas para ser eventualmente mantenido por el estado. De lo contrario no solamente no llegas a la Canasta, sino que puedes meter en ella al que te estorbe y sacar de ella a quienes necesites, sea porque la Justicia está en la práctica privatizada (es decir, tiene precio), sea porque así le puedes sembrar inseguridad ciudadana a tu sucesor, para luego poner a tus medios de comunicación a gritarlo con el fin de acortarle su presencia en el gobierno, o por lo menos ponerle la agenda y limitarle las opciones. Que esto tenga como implicancia que los estándares de la Honestidad y la Honradez Políticas bajen al subsuelo les tiene sin cuidado, pues ellos libran sobre la paciencia ciudadana como sobre una cuenta de ahorros. Por ello el Apra está desapareciendo y el fujimorismo debilitándose, pero solamente hasta un punto, porque de ahí tratarán de inyectar nuevos fondos en la ingenuidad ciudadana. No les falta plata para ello.
Así que cuando los muchachones se escandalizan de lo que ocurre hoy en día en términos de corrupción podríamos mostrarles como eran las cosas antes y reírnos un poco de su ingenuidad, que los viejos han visto muchas más cosas, más indecentes y mucho más descaradas. Y lo digo porque el pasado cuenta, dado que establece las bases de lo que es hoy, a pesar de que los postmodernos crean que el Mundo apareció con ellos, y se sorprenden cuando encuentran cosas que se apartan de un “deber – ser” cuidadosamente amamantado en otras latitudes. Posiblemente esta sorpresa sea propia de los denominados “caviares”, gentes decentes que aspiran y combaten por algo diferente, más justo y menos corrupto, más racional y menos inhumano; pero que carecen de cayetano, aunque no de “street”.
El Coyote y el Correcaminos
Pero esa es otra discusión. La corrupción tiene causas, a pesar de que los reaccionarios, conservadorones, aristocratones y derechistones Brutazos y Achoradazos usen sus periódicos, radios, televisoras y demás Medios de Manipulación para convencer a la Indiada que si hay Corrupción eso depende de los “Valores”, que son algo muy lindo que baja de los cielos y que tienes si eres de Derecha, porque si eres de Izquierda eres malo, ateo, inmoral, chavista y violas dos o tres monjitas antes del desayuno. Y hay gentes, como la Chichi y el Aldo, que son inapreciables para ellos porque se la creen completita – cómo harán en su vida personal para convivir con su ingenuidad es para mí un misterio – y trasladan a la Indiada con más o menos éxito su ingenua convicción y su mundito artificial, bien aceitados por supuesto, que sin plata nada funca.
(Paréntesis Propedéutico: Nadie, y menos aún ellos, se molestará en explicarte qué son los Valores, solamente te dicen que NO hay, o que SE HAN PERDIDO, y que solamente los tienen ellos, y por eso tienen que gobernar. Y se pican si no votas por ellos y te llaman electarado.)
Y como no hay Valores, entonces hay Corrupción, y así la Corrupción te la pintan como el dibujito animado del Coyote y el Correcaminos, es decir una carrerita donde el pobre Coyote emplea todos los medios para alcanzar al Correcaminos, y éste siempre es más rápido, lo que por cierto es el único argumento del Correcaminos, porque a veces el Coyote muestra gran astucia, pero jamás alcanza al maldito pajarraco. Y algunos se la creen tanto que le hacen barra al pajarito. Y así, cuando se les acaban las cortinas de humo, la Corrupción termina siempre por justificarse sola y únicamente en la más elemental y primitiva de todas las justificaciones morales: No me alcanzaron, no me ampayaron, no me demostraron. El argumento de los niños, de los bebes de teta ético-morales para los que no hay falta si no te atrapan, y que le hemos escuchado en estos días – y durante años – a Alan García. Quizá el espectáculo para mí más triste es ver a gentes que uno siempre supuso articulados e inteligentes hacer de escuderos y apropincuarse a las falacias con piruetas mentales para justificar lo injustificable. Me pregunto que verán ellos en el espejo cuando se miran. Valores, no creo, a no ser que sean Valores de la Bolsa de Valores … .
Colofón
Dejamos estas preguntas abiertas para los Pacientes Lectores: ¿Qué les parece, hay Valores, existen esas “cosas”? ¿Qué deberíamos hacer para que haya Valores? ¿Clasificará el Perú al Mundial de Sudáfrica? ¿Clasificará el Perú a algún Mundial, aunque sea el de yan-ken-pó? ¿No hay faltas y delitos si no te atrapan? ¿Fue la revocatoria algo honesto y decente? ¿Son el apra y el fujimorismo grupos de gentes honestas y decentes? ¿Recapturarán La Parada los comunicores? ¿Fueron ilusos y manipulados los que votaron por el Sí y creyeron que no tratarían de recuperar La Parada, o era que no les importaba? ¿Qué son las argollas y las mafias, cómo se organizan, cómo se organiza la corrupción?
Habrá una segunda parte de este artículo, y si Dios y mis lectores quieren, una tercera y una cuarta, y quién sabe si más. Trataremos de avanzar a responder tan profundas interrogantes. Hasta entonces. Esta vez fueron el Coyote y el Correcaminos. Viene ahora Scott McCloud, el Ángel del Espacio. El que tenga Oídos, que Vea.